Querido lector,
Este newsletter es parte de la iniciativa “Cartas para un mundo mejor”, una propuesta con alma y muy motivadora que nace de Mario Acevedo Aguilar para que desde nuestra experiencia personal podamos aportar algo que pueda contribuir positivamente al mundo.
He disfrutado cada una de las cartas que encontraréis al final y la próxima carta va por parte de Mónica J
Este último año me enfoqué en escuchar mi voz interior más que siempre y atender las señales de mi cuerpo como capacidades fundamentales para vivir mejor. Al hacerlo, siento que dejo de ser mi propia adversaria y me alineo con mi verdadera esencia, mejorando mi mundo, creo una base más liberada para mi encuentro con todos lo demás sin sentir que pierdo una oportunidad.
He llegado a estas conclusiones a través de experiencias dolorosas y reveladoras, que quiero contar de la siguiente manera:
En la penumbra de los días, entre las sombras danzantes del pasado y los susurros del futuro, yace un susurro dorado, una melodía inaudita que se despliega como una enredadera etérea. En los pergaminos de nuestras experiencias se encuentra una lección arcana, un rastro de tinta invisible que solo se revela al buscador más intrépido. Así, he descubierto, entre los murmullos de mi propio ser, una voz antigua y sabia, una voz que no es más que la mía, pero que parece surgir de un rincón ajeno.
Esta voz interior, un canto de sirena en el océano de mi alma, me ha hablado en susurros cristalinos, palabras de luz que emergen de la maraña de mi subconsciente. Pero, ¿cuántas veces, oh, cuántas veces, he silenciado su canto con el ruido ensordecedor del mundo exterior? En los archivos polvorientos de mi memoria, puedo ver claramente cada momento en que la ignoré, cada vez que la realidad me arrastró lejos de su etérea sinfonía.
Sin embargo, ella, mi voz, mi guía invisible, siempre ha estado de mi lado, como un guardián celeste, un faro en la tormenta. Su melodía es una frecuencia pura, un hilo dorado que conecta el presente con la eternidad. Ella buscaba salvarme, tejer un manto de sabiduría y protección alrededor de mi ser, pero, en nuestra ceguera cotidiana, nos tapamos los oídos e ignoramos su canto sagrado.
En mi vida, donde los sueños y la realidad se entrelazan en un ballet surrealista, quiero aprender a escucharla. Para ello, he intuido que cada día, un momento de silencio meditativo recorriendo a mi manera mi interior, es quizás una forma de llegar a su rincón y escucharla en voz alta. Es como si el tiempo se detuviera, y en ese momento de claridad cristalina, pudiera ver el universo desplegarse ante mis ojos.
Probablemente escuchar nuestro cuerpo es una de las formas más puras de conectarnos con nuestra esencia. Nuestro cuerpo, con sus señales y sensaciones, nos habla en un lenguaje directo y sincero. Descifrar sus mensajes y atender sus necesidades es esencial para vivir en armonía. El cuerpo es un templo sagrado, un reflejo de nuestra alma, y prestarle atención es una práctica venerable. Al unir la voz interior con la sabiduría del cuerpo, encontré mi equilibrio.
Siento que esta voz, este eco de color, no es una mera ilusión, sino la esencia misma de mi ser, un hilo conductor que nos conecta a todos con el infinito. No hay técnica que pueda compartir porque todos tenemos laberintos distintos. “CONFíA EN TI”
Ahora, querido lector, me dispongo a dar un vuelco importante a esta carta, llevándote hacia un terreno que quizás no esperabas. Quiero compartir el origen de mi marcado aprendizaje:
Mi encuentro con el psicópata narcisistas encubierto.
Este tema, aunque doloroso, ha sido revelador y transformador, enseñándome que nadie está exento a este falso encuentro.
Tras Congreso de Psicopatía Encubierta Red Pharos fue un punto de inflexión en mi comprensión. Nunca imaginé que alguien pudiera ser tan completamente ajeno al bien. Escuchar hablar sobre Robert Hare y su trabajo me dejó perpleja. La idea de que existen personas que no sienten empatía, miedo ni culpa era algo que me resultaba difícil de aceptar. Saber esto me robaba un poco de mi inocencia. Siempre asumí que todos teníamos una chispa de humanidad, un buen fondo. Pero las ponencias y los testimonios me mostraron una realidad mucho más oscura. La idea de que había pasado tiempo con alguien capaz de manipular y dañar a otros sin remordimiento alguno me causó una gran conmoción.
Un estudio de resonancias magnéticas reveló que los narcisistas patológicos tienen menos materia gris en una región cerebral asociada con la empatía y la compasión. Esta deficiencia podría explicar su dificultad para conectar emocionalmente con los demás y su tendencia a manipular y dañar. Experiencias traumáticas en la infancia los llevaron a desconectar de sus emociones y adoptar un comportamiento manipulador y dañino. Mimetizándose en la sociedad, buscan el control y el poder, acumulando a lo largo de su vida hasta 60 víctimas. No es una enfermedad, es un trastorno de la personalidad con patrones de comportamiento resistentes al cambio. van a terapia (alarmante) con la única intención de mutar y mejorar sus estrategias.
Mi confusión se difuminó. Me di cuenta de que no se trata de personas malas que hacen el mal, sino de individuos que funcionan de manera diferente, con un cableado cerebral distinto.
Del Victimismo al Empoderamiento
Con terapia especializada, comencé a liberar culpas y a entender la magnitud de la manipulación a la que había sido sometida, pequeñas semillas que luego germinaban en una gran confusión y culpa. Recordé todas las veces que mi voz interior me había alertado: "cuidado", "no me gusta", "hay algo raro en esto", "esto está mal". Cada una de estas advertencias junto a nuevos dolores en mi cuerpo era un desvío seguro que no tomé, me mantenía atrapada en esa situación. (ha de ser terapia especializada en PN encubiertos, ya que teorías de espejo no son aplicables, la víctima vivió un espejismo creado por otro)
En terapia surgió el comenzar a escribir como una herramienta de sanación. A través de las palabras, encontré un espacio donde mis emociones podían ser expresadas. Así nació mi cuenta de Substack - Spirit Sigh Daughter, un refugio sagrado para mi, donde la escritura se transforma en un medio para alinear mi corazón y mi mente, y convertir el dolor en sabiduría… en un suspiro espiritual como un puente hacia mi propia transformación. Comparto mi camino de sanación principalmente por mí misma. Si mi experiencia puede resonar o ser útil para alguien más, maravilloso!
Detrás de mi historia hay una autoridad espiritual chamánica de la new age, alguien querido por todos, con una vida aparentemente feliz y bonita, una “garantía” aparentemente honrada con alumnos con vidas dignas que refuerzan su narrativa donde nadie reconocerá que forma parte de una “SECTA” y en ese silencio, los abusos continúan perpetuándose.
Últimamente, el término "narcisista" se usa con demasiada ligereza, aplicándolo a cualquier comportamiento egocéntrico. Esto es perjudicial y cabe aclarar que “todos los psicópatas son narcisistas, mas no todos los narcisistas son psicópatas y no han de ser como Hannibal Lecter. El considerado más peligroso es el “Psicópata Narcisista espiritual” y ahora hay una proliferación de ellos.
La Psicopatía narcisista es una pandemia de abuso encubierta.
Y para concluir, la manipulación narcisista puede dejar profundas heridas, arrastrándote a la oscuridad donde el psicópata se alimenta de tu tristeza y vulnerabilidad. Mientras permaneces en ese estado, sigues siendo su víctima. Reconocer el patrón de idealización y devaluación es el primer paso para liberarte de esa toxicidad. La sanación es un proceso que implica duelo, pero también el empoderamiento de tomar las riendas de tu bienestar. Al romper con el ciclo de victimización, te alejas de la oscuridad en la que habita el narcisista y caminas hacia la luz de tu propia fuerza y resiliencia.
Es el viaje en el que me encuentro actualmente.
Estamos en este mundo para compartir desde vínculos horizontales y sanos. El catalizador principal siento que será ser siempre yo misma, regular mi empatía, escucharme sin confundir ego con amor propio. Nuestra voz siempre esta de nuestro lado y no puedo brindar una fórmula para ello, tu y solo tú puedes encontrar la ruta a esa mapa que te lleva a ese encuentro tan personal.
Un abrazo.
Spirit Sigh Daughter.
Dedico estas palabras a quienes luchan contra la depresión y el abuso emocional. Que encuentren la fuerza para salir de la oscuridad y descubrir la luz que llevan dentro.
Os comparto sites, artículos, estudios y al final las cartas de mis compañeros <3
https://red-pharos.org/
https://lamenteesmaravillosa.com/robert-hare-biografia/
Copilación de “Cartas Para Un Mundo Mejor”
Carta #1 Mario Acevedo Aguilar
Rechazar activamente las tendencias que no benefician al mundoCarta #2 Christopher Lopez
Poniendo ejemploCarta #3 Reina
Dejar (lo más posible) el ego de lado y no tomar las cosas personalmenteCarta #4 Alex Pares
Ni juzgar a los demás ni buscar parecernos a ellosCarta #5 Julia Úbeda
Detecta tus detonantes emocionalesCarta #6 Álvaro García
Cuidar la naturalezaLa piedra de toque del cambio
Carta #8 Permaprendices Marta y Andreu
Carta para un muendo mejor
La inmensa playa es un acumulado de pequeños granos.
Muy buena carta, muy personal y por es poderosa.
Yo todavía sigo aprendiendo a escuchar esa voz mia interior que dice “diviértete y no creas que el presente tiene tanto peso en el futuro”
Porque me auto evalúo mucho y si fluyera más iría mejor.
Muchas gracias por recordármelo 💚
Hola Spirit! Es muy valiente por tu parte compartir tus experiencias y revelar esta realidad oscura de la que tenemos que ser conscientes. Yo no creo que nadie esté más allá de la redención, pero sí creo que aquellos que están muy en el límite de los trastornos de personalidad, como los psicópatas, no pueden ser ayudados por sus víctimas. Lo que les puede despertar algún día es la autoridad, ponerles límites, no dejarnos atrapar por su engaño. El verdadero amor que no es pasivo ni subordinado como lo entendemos habitualmente sino que pone orden y las cosas en su sitio. Y desde luego si te encuentras una persona así, ponle freno. En Internal Family Systems se han estudiado a los narcisistas y se ha descubierto que ese afán de control corresponde a una parte muy soterrada que es profundamente insegura. Pero el trabajo de recuperar y sanar a esa parte es complejo. Requiere un terapeuta muy alineado con su Ser, que haya cierta apertura por parte del narcisista o persona con trastorno límite de la personalidad, y en algunos casos son de ayuda psicodélicos-empatógenos como mdma o ketamina. Difícil, pero no imposible, y hay casos de narcisistas recuperados. Quería dejar este comentario aquí para mostrar la otra cara y que nadie es innatamente malo, aunque puede que pasen muchas vidas hasta que la persona pueda salir de la espiral destructiva y patológica. Un abrazo, bella! M.